La elección de tus mejores abridores de fantasía, ¿deberá ser por su poder o por su astucia?

Traducido por Marco Gámez

El beisbol de fantasía es el deporte fantástico más masoquista que existe. La única prueba que necesitas es ver la cantidad de personas que sentirían repulsión ante la concept de tener que armar una alineación tan seguido, sin importar si la liga es diaria o semanal. Quienes se acerquen a las ligas por pura casualidad también podrían estremecerse con el constante acecho de la temporada de procesos de selección. Como los anuncios de regreso a clases en la televisión en junio, o los adornos navideños apareciendo en las tiendas antes de Halloween, siempre es momento de empezar a robarle tiempo al presente. Por ejemplo, ya se han realizado 20 procesos de selección en el Campeonato Nacional del Beisbol de Fantasía.

En esas jornadas de escogencia, los brazos mejor clasificados han sido los esperados: Skubal, Skenes, Crochet, Yamamoto, Gilbert, Brown, Sale, Sánchez, deGrom, Greene. Ese es el grupo de élite, y no estoy seguro de cuánto cambie una vez que la temporada de procesos de selección realmente comience. Conociendo sus historiales y perfiles, probablemente puedas imaginar a cada uno en el momento en que necesitan un strike, y saber qué lanzamiento harían. Sus compañeros de equipo lo saben. Los bateadores lo saben. Y, aun así, puedes imaginar el swing fallido o el roletazo débil, y la entrada terminando. Es una decisión basada en el poder.

Sin embargo, he estado pensando mucho en cuánto poder está realmente involucrado. No vengo a decirte que un pelotero lanzando a 98+ mph (158 kph) o tirando una curva de más de 90 mph (150 kph) no sea abrumador. Solo me alegra tener nuevas formas de hablar sobre lo que “abrumador” puede significar. Amigos, estoy completamente inmerso en la fiebre de la Puntuación del Arsenal. No puedo evitarlo. La información más reciente en nuestras tablas de clasificación y páginas de lanzadores ofrece perspectivas que no aparecen en otros lugares. Incluso, en las métricas tradicionales del repertorio todo gira en torno a un solo lanzamiento; apenas muestran cómo los lanzamientos funcionan entre sí y dejan vacíos cuando ves un gran número que no coincide con los resultados. La Puntuación del Arsenal describe cómo todas las piezas trabajan en conjunto y se complementan unas a otras. Como escribí a principios de esta semana: es un guiso que está hirviendo a fuego lento.

El Issue Sorpresa evalúa cuánto se mueve un lanzamiento de manera inesperada en comparación con otros lanzamientos que podrían confundirse dentro del repertorio de un pitcher. Cuanto más alto es el Issue Sorpresa de un lanzador, más possible es que tome desprevenido al bateador. No es considerada exactamente como una estadística superior, pero los jugadores que tienen un valor de 100 terminan cerca del promedio. De los 166 brazos que lanzaron al menos 1,250 lanzamientos el año pasado, el punto medio fue 99.3. Mira cómo les ha ido a los 20 lanzadores más seleccionados hasta ahora:

Puede que haya un grupo de estos lanzadores en los que, al verlos, ya no tengas tanta confianza, lo cual cube mucho sobre lo inquietante que puede ser el pitcheo para los participantes en el beisbol de fantasía. Queremos las apuestas seguras, casi moldeando a los jugadores según nuestro deseo de tener opciones fáciles. Pero ellos no nos lo ponen tan sencillo. La mitad de este grupo está por debajo del punto medio, lo que sugiere que incluso los mejores, confiando en su mejor repertorio, pueden ser algo predecibles. Dado que la variabilidad en los lanzadores reina con complete indiferencia, eso no resulta muy alentador (o tal vez sí, si eres de los que insisten en que se puede encontrar buen pitcheo en rondas posteriores). Logran tener éxito, pero podrían tener menos margen de error si alguno de sus lanzamientos pierde efectividad o si su mecánica cambia de forma que permita a los bateadores tener mejores lecturas.

Sin embargo, ese no es el enfoque más apropiado. Incluso en las métricas del repertorio, estar cerca del promedio puede ser útil. Del mismo modo, si te tomas el tiempo de identificar cuáles lanzadores están un par de puntos por debajo en cuanto a sorprender a los bateadores, 15 de los 20 más seleccionados en los drafts son consistentes o mejores que eso. Sale y Greene son los más atípicos, y ambos tienen grandes diferencias en el movimiento y la velocidad de sus lanzamientos. Esos factores son importantes y ayudan a expresar cuánto puede influir una gran curva con mucho quiebre o un cambio endemoniado en todo un arsenal.

No necesariamente vas a elegir a un jugador basándote en eso, pero sí puedes usarlo para entender mejor cómo cubre el plato un lanzador. Tal vez eso te ayude a procesar la importancia de que un pitcher comience a cubrir una nueva zona del plato, como hemos visto con Crochet y Brown al agregar sinkers en los últimos años. No se trata solo de una variación más, sino de que han incorporado algo a su forma de lanzar que los hace más resistentes. Una razón más para apostar por eso en cuanto lo veas.

Combinar esta información con el puesto de selección promedio (ADP, por sus siglas en inglés) también podría ayudarte a sacudir un poco tu tablero de draft, basándote menos en intuiciones o procesos antiguos y más en lo que realmente hace un lanzador. Incluso un rápido vistazo a un recurso ordinal como los resultados de los procesos de selección hará que tu cerebro construya niveles o grupos. Al last de la primera ronda es cuando algunos participantes se convencen de adelantarse en seleccionar el pitcheo en lugar de intentar mantenerse a la par con bates más débiles desde el inicio. Luego llega la primera gran oleada a principios de la tercera ronda, y otra a mediados o finales de la cuarta.

Para ese momento, ya estás dentro de un grupo con problemas de lesiones y puede ser difícil imponer tus criterios. Sin embargo, ver cómo funciona el arsenal de un lanzador es una razón concreta para elegir a ciertos brazos una o dos rondas antes, especialmente mientras más avancen tus selecciones. Es una forma más de priorizar habilidades realmente significativas. Eso podría significar una apuesta un poco mayor por Spencer Schwellenbach, a pesar de su fractura de codo, o fe en el estilo poco ortodoxo de Bryan Woo en ronda comparable a la de Jacob deGrom.

El Issue Sorpresa no lo es todo, y no estoy aquí para venderte un solo aspecto de una estadística nueva y emocionante. Lo que me interesa más es desarrollar una mejor comprensión de cómo los mejores brazos no son solo fuerza o astucia, ni siquiera más de una que de la otra, por mucho que nos gusten las dicotomías claras. En realidad, son mucho de ambas cosas, y eso nos ofrece la oportunidad de refinar nuestro proceso al expresarlo de manera más precisa.