Picture credit score: Syndication: Sarasota Herald-Tribune
Traducido por Fernando Battaglini
Primera parte
Probablemente debería mencionar la otra anomalía que quizás hayas notado en el Juego de las Estrellas. Finalmente usaron el derbi de cuadrangulares para desempatar en lugar de additional innings.
Vamos a dejar esto en claro. No.
El duelo de cuadrangulares ocurrió simplemente porque nadie quiere lanzar en el Juego de las Estrellas. Fue divertido, pero también fue un partido de exhibición. Es revelador que, en lugar de una carrera de corrido de bases, una competencia de toques de bola, una carpa de lanzamiento rápido de feria, un derbi de comando/management o un concurso de trivia, la MLB optó por los palos de vuelta entera.
Supongo que la MLB preferiría aceptar los empates. Se han barajado otras concepts para romper un empate después de nueve entradas que no consistían en “jugar otra entrada”. Pero todas se enfrentan al problema del “béisbol mutante”. Y fuera lo que fuera el duelo de cuadrangulares, no period béisbol. Period como decidir una last de la NBA con un concurso de triples o la last del Mundial con penaltis. (Sí, lo sé).
Pero hablemos del “¿Por qué no?”. Después de todo, esta es una liga donde la Regla del Corredor Fantasma lleva varios años vigente. La pequeña pero importante diferencia con la Regla del Corredor Fantasma es que, independientemente de la diferencia entre los dos equipos en entradas additional, se obtendrá de todas las habilidades del béisbol. El duelo de jonrones recompensaría la potencia en la práctica de bateo. Además, ya no te enfrentas a alguien que intenta sacarte del juego. Tu entrenador ahora es el lanzador. Al menos en los tiros penales, tú y el portero buscan objetivos opuestos, y ambos tienen la oportunidad de lograrlo.
El duelo de cuadrangulares tendría dos consecuencias que la MLB definitivamente no desea. Una es que reduciría aún más el rol del abridor, especialmente si se implementara después de nueve entradas. Como los mánagers solo tendrían que preocuparse por nueve entradas de cobertura, no habría necesidad de retener a uno o dos relevistas “por si acaso”. Si hay una décima entrada, el entrenador de tercera base estaría lanzando bolas suaves. La estrategia de la MLB ha evolucionado hasta el punto en que todos los lanzadores son relevistas. Incluso los abridores. El modelo del abridor llevando el juego y el bullpen recogiendo lo que no pueden terminar ha desaparecido. Ahora, principalmente, la tarea del abridor es proporcionar suficiente cobertura masiva para llevar el juego al bullpen de manera responsable. Los relevistas simplemente son mejores para conseguir outs que los abridores cansados. Para una liga que ha hablado de restaurar a los lanzadores abridores a un lugar de orgullo, esto agravaría el problema.
También *revisa notas* cambiaría radicalmente el juego. Los equipos tendrían todo el incentivo para tener un bateador designado para el duelo de cuadrangulares, alguien con potencia a las cinco en punto. Mi amigo Lewie Pollis analizó el duelo de jonrones y descubrió que los mejores bateadores (menciona a Joey Gallo en una nota al pie) podrían valer algo así como dos victorias y media en una temporada, basándose solo en ese talento.
Durante un partido, ocurren varias cosas que pueden inclinar la balanza, y nunca se sabe quién estará al bate cuando llegue el momento. El swing-off sería, en efecto, el juego de ese día. Podría ser un minijuego divertido para jugar de vez en cuando, pero no es béisbol. Por eso nunca ocurrirá.
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